Praga – Los resultados de las elecciones europeas contribuyeron al debilitamiento del euro frente al dólar y también redujeron la posibilidad de una pronta adopción de la moneda europea común en Chequia. Los analistas económicos consultados por ČTK coinciden en ello. Según los expertos, el fortalecimiento de la extrema derecha y el debilitamiento de los verdes pueden complicar las votaciones sobre cuestiones relacionadas con la protección del clima, pero no esperan cambios fundamentales en el Pacto Verde Europeo (Green Deal). También consideran que puede ser más complicado el apoyo europeo a Ucrania.
«El claro perdedor de las elecciones al Parlamento Europeo es la moneda común de los países de la eurozona. En reacción a los resultados electorales, esta se debilitó en el par con el dólar estadounidense a los niveles más bajos en un mes», evalúa el impacto de las elecciones el analista de Purple Trading Petr Lajsek. Advirtió que en el Parlamento Europeo han ganado fuerza los opositores a la moneda europea común de Francia y Alemania. «Una postura similar tienen también los eurodiputados recién elegidos en Chequia. Solo aproximadamente una cuarta parte de ellos está claramente a favor de la adopción del euro», añadió Lajsek.
El economista jefe del Trinity Bank, Lukáš Kovanda, supone que el interés en la adopción del euro en Chequia disminuirá a la luz del resultado de las elecciones. «Después de las elecciones europeas de ayer, es más claro lo que ya se vislumbraba antes de ellas, a saber, que el apoyo al euro está cerca del suicidio político», constató.
Según los analistas, las elecciones también tendrán un impacto en la financiación de la deuda de los países europeos. «Los resultados de las elecciones tampoco gustan a los inversores en el mercado de bonos, en el que se está produciendo un aumento de los rendimientos, es decir, el encarecimiento de la deuda estatal», dijo Cverna. «Los rendimientos de los bonos estatales checos solo crecen ligeramente y en el vencimiento a diez años alcanzan el 4,19 por ciento», añadió Cverna.
Hradil no prevé cambios fundamentales en el funcionamiento de las instituciones europeas en el ámbito económico. «Aunque políticamente han obtenido ganancias parciales aquellos que representan una oposición a la corriente principal hasta el momento, la mayoría existente ha defendido su posición. Por lo tanto, aunque se pueden esperar cambios cosméticos en el enfoque hacia la migración o la política climática, la disminución de la competitividad económica global de Europa probablemente seguirá siendo en Bruselas el proverbial ‘elefante en la habitación’, es decir, un tema del que se prefiere no hablar demasiado, aunque sea imposible no notarlo. Así, es probable que Europa siga siendo líder mundial en la regulación económica, que luego será difícilmente capaz de reaccionar ante los cambios globales dinámicos», advirtió.