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En el vigésimo aniversario de su adhesión a la Unión Europea, los Estados de Europa del Este celebraron su ingreso en la UE. El 1 de mayo de 2004 ingresaron en la UE diez países: Chequia, Polonia, Hungría, Eslovaquia, Eslovenia, Lituania, Letonia, Estonia, Chipre y Malta.

Polonia encontró su lugar el 1 de mayo de 2004, declaró el miércoles el ministro de Exteriores, Radosław Sikorski, en una reunión con su homóloga alemana, Annalena Baerbock, en las ciudades hermanas germano-polacas de Fráncfort (Oder) y Slubice: «Entre amigos, entre aliados, en Europa, en casa. Por esto han luchado generaciones de polacos». Baerbock subrayó que toda la Unión Europea se había beneficiado de la ampliación a los países del antiguo bloque del Este.

Baerbock añadió que la integración europea «no cae del cielo», sino que necesita una responsabilidad fuerte y valiente. Según ella, debido a la guerra en curso en Ucrania, el continente «no puede permitirse zonas grises en Europa». «La UE debe reformarse para ser más fuerte en política de seguridad, para hablar con una sola voz, y al mismo tiempo aceptar a aquellos países que también quieren formar parte de esta unión de libertad y seguridad», afirmó.

La ministra alemana de Asuntos Exteriores, Annalena Baerbock, y su homólogo polaco, Radoslaw Sikorski, participan en una rueda de prensa sobre el 20º aniversario de la adhesión de Polonia a la UE. Patrick Pleul/dpa

En una declaración conjunta de los presidentes de los países bálticos el miércoles se leía: «Hemos experimentado un enorme crecimiento económico, estabilidad y seguridad, al tiempo que representamos una notable historia de éxito de la integración y transformación europeas». Los jefes de Estado Alar Karis (Estonia), Edgars Rinkēvičs (Letonia) y Gitanas Nausėda (Lituania) prosiguieron: «La inscripción «Unión Europea» apareció en los pasaportes de nuestros ciudadanos, marcando un regreso triunfal a nuestro legítimo lugar histórico como miembros de la familia europea.»

El martes, el presidente alemán Frank-Walter Steinmeier celebró el histórico aniversario junto con el presidente checo Petr Pavel en Praga. Ambos jefes de Estado se pronunciaron a favor de la admisión de más países candidatos a la Unión Europea. «Si dejamos a los estados de los Balcanes Occidentales, Ucrania, Moldavia y Georgia a la puerta durante demasiado tiempo, los entregaremos a actores como Rusia, que no tienen buenas intenciones con los europeos ni con Europa en absoluto», advirtió Pavel. Steinmeier también dijo: «Los estados de los Balcanes Occidentales, Ucrania y Moldavia pertenecen a una Europa libre y a nuestra Unión».

Charles Michel: la ampliación es un imperativo geopolítico

La Unión Europea y los países candidatos deben estar preparados para la ampliación de aquí a 2030, declaró el lunes el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, en la ceremonia para conmemorar el vigésimo aniversario de la ampliación de la UE en 2004. Añadió que la próxima ola de ampliación de la UE representa un imperativo geopolítico y «una cita con la historia». Subrayó que la ampliación es la piedra angular de la soberanía estratégica de la UE.

«Los países candidatos y las instituciones de la UE tienen mucho trabajo por hacer. Reitero mi firme convicción de que debemos estar preparados para la ampliación, por ambas partes, en 2030», dijo Michel. Explicó que para los candidatos esto significa aplicar las reformas necesarias y resolver todas las disputas bilaterales, y para la UE reformar el programa y el presupuesto y el proceso de toma de decisiones. «Estamos trabajando duro con los 27 Estados miembros para preparar la agenda estratégica. Servirá de base para los próximos cinco años».

Reformas necesarias

En este sentido, la ministra belga de Exteriores, Hadja Lahbib, y la vicepresidenta de la Comisión Europea para Valores y Transparencia, Věra Jourová, abogaron por promover decisiones por mayoría cualificada en lugar de por unanimidad en los ámbitos de Defensa y Asuntos Exteriores. Son «absolutamente existenciales», en palabras de Jourová, que anticipó que el derecho de veto será uno de los temas centrales de los debates sobre la ampliación.

Otros, dijo, serán el futuro del artículo 7 -el procedimiento que permite suspender los derechos de adhesión de un país miembro por problemas con el Estado de Derecho, abierto hasta ahora a Hungría y Polonia- así como el presupuesto, dado que será necesario que los países tengan capacidad para absorber los fondos europeos.

«La UE es ante todo una unión de valores, no un cajero automático», dijo Lahbib, quien añadió que la UE debe dinamizar su mercado único y reformar sus procesos de toma de decisiones para reaccionar con mayor agilidad y «resolver el problema de los vetos, a veces abusivos».

En la reunión de ministros de Exteriores celebrada el martes en Bruselas participaron por primera vez los representantes de los diez países candidatos a la adhesión: Albania, Bosnia-Herzegovina, Georgia, Moldavia, Montenegro, Macedonia del Norte, Serbia, Kosovo, Turquía y Ucrania. Jourová también destacó en esa conferencia que se trataba de «un buen ensayo» de lo que sería debatir con 37 miembros.

Turquía se convirtió en candidato a la UE en 1999, y probablemente nunca ha estado tan lejos de la adhesión como ahora. En teoría, un país candidato puede no convertirse en miembro.

En la actualidad, los Estados miembros tienen distintas prioridades respecto a la adhesión, y la guerra de Ucrania es un factor importante:

Varios eurodiputados daneses, por ejemplo, desde los Verdes del SF hasta el partido gobernante Venstre, expresaron su apoyo a la ampliación de la UE a 30 países o más. Morten Løkkegaard, principal candidato del partido gobernante Venstre, declaró que le gustaría que Ucrania, Moldavia y Macedonia del Norte fueran los primeros en incorporarse a la UE. Advirtió de una posible influencia rusa tras el conflicto de Ucrania y se mostró contrario a la adhesión de Turquía.

«Hay un antes y un después de la guerra de Ucrania. Si no incorporamos a estos países, pronto caerán bajo la mano pegajosa de Putin».

Los Balcanes Occidentales siguen esperando

La región de los Balcanes Occidentales incluye Albania, Bosnia-Herzegovina, Serbia, Montenegro, Macedonia del Norte y Kosovo.

En Bruselas se considera que Montenegro es el país más avanzado en el proceso de adhesión. No se espera la ampliación de la UE hasta finales de la década como muy pronto. La UE mantiene negociaciones de adhesión con Montenegro desde 2012.

En marzo, la UE decidió iniciar las negociaciones de adhesión con Bosnia-Herzegovina (BiH). Sin embargo, la primera conferencia de adhesión no se organizará hasta que el país haya cumplido los requisitos de reforma pendientes, por ejemplo en la lucha contra la corrupción y la delincuencia organizada. A pesar de los continuos esfuerzos, promesas y avances significativos, debido a los frecuentes desacuerdos políticos internos, BiH se enfrenta a retos en su camino hacia la adhesión a la UE.

«Nuestra generación se enfrenta ahora a la tarea de defender y fortalecer el proyecto europeo de paz y libertad, aunque cueste una increíble cantidad de energía», dijo Baerbock. Añadió que para que esto tenga éxito las reformas son necesarias. Esto incluiría también menos opciones de veto en el Consejo de la UE.

Macedonia del Norte es candidata a la UE desde hace 17 años. De acuerdo con los criterios de la UE para las negociaciones de adhesión, la nación debe adoptar plenamente el acervo comunitario e impulsar las reformas, especialmente en ámbitos como la reforma judicial y la lucha contra la corrupción y la delincuencia organizada. La colaboración regional y unas relaciones de vecindad positivas son cruciales para el proceso de ampliación de Macedonia del Norte. Los esfuerzos para participar de forma inclusiva en la cooperación regional y respetar los acuerdos bilaterales, como el Acuerdo de Prespa con Grecia y el Tratado de Buena Vecindad con Bulgaria, son fundamentales.

Macedonia del Norte se ha comprometido a promulgar enmiendas constitucionales destinadas a reforzar los derechos de las minorías. El objetivo es integrar en el marco constitucional a los ciudadanos, como los búlgaros, que residen dentro de las fronteras del Estado.

Sin embargo, la oposición se opone a los cambios constitucionales necesarios, y no se ha conseguido la mayoría necesaria en parlamento para los cambios constitucionales, lo que ha paralizado las aspiraciones europeas de Macedonia del Norte.

Eslovenia sigue apoyando a la UE

Con su adhesión a la UE, Eslovenia ha cumplido uno de los principales objetivos estratégicos de política exterior que se fijó tras su independencia. El apoyo a la UE entre los eslovenos sigue siendo alto y superior a la media en comparación con otros miembros de la UE, y no hay partidos parlamentarios considerados euroescépticos. Sin embargo, algunos creen que en los últimos años ha habido muy poca inversión sistemática en política europea y en los principales motores del crecimiento económico para hacer de Eslovenia uno de los miembros más exitosos y visibles de la unión.

Entre los nuevos Estados miembros, Eslovenia también ha crecido económicamente, pero mucho más despacio que los demás países que ingresaron en la UE al mismo tiempo o incluso más tarde. En el momento de su adhesión, Eslovenia se situaba en el 88% de la media de la UE, medida en términos de PIB per cápita; ahora está en el 91%. En los 20 años de pertenencia a la UE, Eslovenia ha recibido un total de 13.500 millones de euros del presupuesto comunitario y ha ingresado 8.700 millones, lo que deja un superávit de 4.800 millones de euros en fondos comunitarios durante ese periodo. Pero ha aprovechado las ventajas del mercado interior, que ha impulsado el comercio de bienes y servicios.

Éxito de la integración europea – con cuestiones sin resolver

El martes, la presidenta eslovaca, Zuzana Čaputová, describió la integración en la Unión y la OTAN como uno de los momentos más importantes y exitosos de Eslovaquia en su historia moderna. «Fue un éxito de todo el país, de todos sus ciudadanos», subrayó la jefa de Estado. Recordó que la importancia de la adhesión se reflejó en la vida cotidiana del país. «A través del desarrollo de las infraestructuras, de las oportunidades de empleo, pero también de una Eslovaquia más segura», añadió.

Čaputová también afirmó que, aunque la UE y la OTAN han experimentado cambios a lo largo de dos décadas, en ambas agrupaciones siguen vigentes las mismas normas que se aplicaban cuando Eslovaquia ingresó. «Cada país miembro debe seguir siendo una democracia en funcionamiento», recordó.

Von der Leyen: Estados como Chequia enseñan mucho a la UE sobre el comportamiento de Rusia

En una entrevista a finales de abril con varias agencias de noticias, entre ellas la checa CTK, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, afirmó que «gracias a la amarga experiencia que los países de Europa Central y Oriental tuvieron con la Unión Soviética, la UE ha aprendido mucho sobre las pautas de comportamiento del Kremlin y Vladimir Putin y se ha vuelto más vigilante».

Von der Leyen añadió que la Unión Europea no es perfecta, «pero los beneficios de pertenecer a la UE son enormes». La ampliación también cambió el estatus de la propia UE. Ganó mucho más peso e importancia. «Por supuesto que somos mucho más fuertes con 27 que con 15 [de nosotros] en aquel momento», dijo von der Leyen.

Von der Leyen destacó que el nivel de vida de los residentes en la UE aumentó, la gente se quedó en Polonia en vez de emigrar a los países occidentales. La ampliación de la UE a diez países también ha tenido enormes beneficios económicos. El mercado de la UE se ha convertido en uno de los mayores mercados interiores del mundo y el comercio intracomunitario ha aumentado un 40% respecto a 2004. «En los diez nuevos Estados miembros se han creado seis millones de nuevos puestos de trabajo en estos 20 años, y el desempleo se ha reducido a la mitad», dijo von der Leyen.

Este artículo se publica semanalmente. El contenido está basado en las noticias de las agencias participantes en la ENR.