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ZAGREB – Las instituciones europeas se han ocupado en el último año de la cuestión de la adicción a las redes sociales, con los reguladores de la UE abriendo una investigación contra Meta el mes pasado, mientras que el Parlamento Europeo propuso el año pasado medidas sobre el diseño de plataformas que crean adicción.
A mediados de mayo, los reguladores de la Unión Europea anunciaron que investigarían la posible inducción de adicción en niños en las redes sociales de Meta: Instagram y Facebook.
La Comisión Europea informó que las plataformas de Meta podrían «aprovecharse de las debilidades e inexperiencia de los menores», lo que puede llevar a la adicción y perjudicar la salud mental.
La investigación se lleva a cabo de acuerdo con la Ley de Servicios Digitales, que prevé reglas especiales para las empresas con más de 45 millones de usuarios activos en la UE, es decir, para «plataformas muy grandes en línea».
Para las «plataformas muy grandes en línea» se prevé una multa de hasta el 6% de los ingresos globales en caso de incumplimiento de las disposiciones de la Ley de Servicios Digitales.
Meta rechazó las acusaciones, destacando que la compañía ya ha «desarrollado más de 50 herramientas y políticas» en diez años para proteger a los usuarios menores de edad.
Otras instituciones europeas también se han ocupado del mencionado tema.
Así, el Parlamento Europeo aprobó en diciembre del año pasado un informe sobre el diseño de servicios en línea que crean adicción y la protección del consumidor en el mercado único de la UE.
«Los servicios en línea que crean adicción pueden afectar negativamente a las personas y llevar a un aumento de la presión, el estrés, el mal sueño, la sobrecarga de información, la falta de concentración y la distracción constante», se indica en la explicación de dicho informe.
«Los jóvenes y los niños, especialmente las niñas, son más susceptibles a los síntomas debido al uso problemático de internet, como la depresión y la ansiedad, así como a los efectos negativos en el aprendizaje, la memoria y la capacidad de concentración», agrega.
Así como en la Unión Europea se regulan el tabaco, los juegos de azar y el alcohol porque pueden causar adicción, también es necesario regular el diseño de los servicios en línea, destacaron los eurodiputados.
El Parlamento Europeo entonces solicitó a la Comisión que regule legalmente la cuestión del diseño de las plataformas que crean adicción.
Entre otras cosas, solicitaron a la Comisión que «proponga un ‘derecho a la desconexión’ digital para empoderar a los consumidores, permitiendo que todas las características de búsqueda de atención se desconecten intencionadamente y que los usuarios decidan activar esas características por medios simples y fácilmente accesibles, preferiblemente con una advertencia obligatoria sobre los posibles peligros de activar esas características de participación, ofreciendo a los consumidores una elección y autonomía reales sin sobrecargarles con excesiva información». (4 de junio de 2024)