BRATISLAVA – Eslovaquia no se unirá durante la presidencia de Hungría en el Consejo de la Unión Europea a las actividades destinadas a su boicot. El presidente de la República Eslovaca, Peter Pellegrini, informó de esto después de la reunión del jueves (18 de julio) con el presidente húngaro Tamás Sulyok en Budapest, informa la corresponsal especial de TASR.
«No creo que sea necesario castigar a alguien solo porque intenta entablar algún diálogo, y la República Eslovaca no lo hará,» declaró Pellegrini. Aseguró que los representantes del gobierno eslovaco participarán en las actividades de la presidencia húngara a todos los niveles apropiados. No ve razón para castigar la postura soberana del gobierno de uno de los países de la Unión Europea solo porque no a alguien no le gusta.
El presidente eslovaco también solicitó al jefe del estado húngaro que Hungría incluya entre sus prioridades durante su presidencia el tema de las prácticas comerciales desleales y la persistente doble calidad de los alimentos. «La Unión Europea y la Comisión no lograron resolver este serio problema, y por eso estaré contento si Eslovaquia, a través de la presidencia húngara, puede seguir destacando este tema y en la cumbre de otoño nuestros representantes en el consejo de primeros ministros volverán a tratar el asunto,» explicó.
Pellegrini calificó al Grupo Visegrado de proyecto viable. «Estoy convencido de que en la actualidad hay un gran número de temas en los que los países del V4 pueden encontrar un lenguaje común. Y algunos de estos temas son también prioridades de Hungría durante su presidencia en el Consejo de la Unión Europea,» observó. Mencionó, por ejemplo, la prioridad de resolver la migración ilegal o la protección y el apoyo a la agricultura. También acogió con beneplácito la agenda de la presidencia húngara sobre la ampliación de la Unión Europea a los países de los Balcanes occidentales.
La Comisión Europea (CE) anunció el pasado lunes que en las reuniones informales de ministros en Hungría solo estarán representados por altos funcionarios, y no por comisarios europeos. Esta fue una reacción a las recientes visitas del primer ministro húngaro Viktor Orbán a Moscú y Pekín. El Parlamento Europeo aprobó la semana pasada una resolución condenando la reunión de Orbán con el presidente ruso Vladímir Putin.
El primer ministro de la República Eslovaca, Robert Fico, dio instrucciones a los representantes estatales en los organismos de la Unión Europea (UE) para que de ninguna manera atacasen a Hungría y su presidencia en el Consejo de la UE. Lo declaró el pasado domingo (21 de julio) en un video en la red social.