Bruselas – Los embajadores de los Estados miembros ante la Unión Europea (UE) lograron este miércoles un acuerdo en principio para utilizar los beneficios de los activos rusos congelados en apoyar «la recuperación y la defensa militar» de Ucrania ante la agresión de Rusia.
«Los embajadores de la UE acordaron en principio medidas sobre los beneficios extraordinarios de los activos inmovilizados de Rusia», escribió la presidencia belga del Consejo de la UE en su perfil de la red social X.
Agregó que el dinero «servirá para apoyar la recuperación y la defensa militar de Ucrania en el contexto de la agresión rusa».
La Comisión Europea propuso el pasado marzo utilizar los beneficios extraordinarios de los activos rusos congelados por las sanciones en relación con la guerra en Ucrania, que ascienden a entre 2.500 y 3.000 millones de euros anuales, en financiar armas y munición para ese país principalmente.
Se espera que la primera transferencia de las ganancias para ayudar a Ucrania a defenderse contra Rusia se produzca en julio.
Fuentes comunitarias detallaron que el 90 % de los beneficios de los activos inmovilizados se destinará al Fonfo Europeo de Apoyo a la Paz (FEAP) para apoyo militar. El FEAP es un instrumento a través del que los países de la UE cofinancian el envío de armas a Ucrania desde el inicio de la invasión rusa en febrero de 2022.
El otro 10% se destinará al paquete de ayuda macrofinanciera a Ucrania del presupuesto general de la Unión Europea. Este año, el club comunitario acordó una ayuda de 50.000 millones de euros a Ucrania que se enmarca en el presupuesto comunitario revisado, cubre los próximos cuatro años hasta 2027 y se desembolsa en forma de préstamos (33.000 millones de euros) y subvenciones (17.000 millones).
La mayoría de los activos rusos congelados están depositados en Euroclear, un organismo con sede en Bruselas que posee unos 192.000 millones de euros.
Bélgica se queda con una parte de las ganancias de esos valores en concepto de impuestos corporativos, un hecho que ha sido criticado por otros Estados miembros.
Ese país argumenta que se trata de un impuesto «general, no algo que haya sido inventado para Ucrania» y que parte de lo que se recauda sirve precisamente para ayudar a Kiev con sus necesidades armamentísticas y para apoyar a los refugiados.
Las fuentes precisaron que los ingresos fiscales generados en Bélgica por esos beneficios se seguirán destinando a Ucrania en su totalidad.
El impuesto sobre sociedades es del 25 % en Bélgica y se aplica a todas las empresas, según las fuentes, que insistieron en que es imposible eliminarlo.
No obstante, recordaron que en 2022 Bélgica decidió asignar todos esos ingresos extraordinarios del impuesto de sociedades al apoyo a Ucrania y que en 2023 crearon un fondo específico para ello.
Para el ejercicio fiscal de 2024, se espera un importe de 1.700 millones de euros de impuestos corporativos nacionales provenientes de activos rusos inmovilizados, de los cuales alrededor de 1.000 millones ya han sido asignados a Ucrania.
La nueva legislación se aplicará a los beneficios extraordinarios restantes después de esta imposición obligatoria, de acuerdo con las fuentes.
Los embajadores de los Estados miembros decidieron que la tarifa que Euroclear cobrará por manejar los activos se sitúe en el 0,3 %.
Algunos Estados como Austria, Irlanda, Malta y Chipre son reticentes a comprar armamento para Ucrania por su política de neutralidad y Hungría ha dicho de manera reiterada que no respalda la idea. (8 de mayo)
La responsabilidad editorial de esta publicación es de EFE.