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Cuando Michel asumió la presidencia del Consejo Europeo en 2019, se había aceptado la idea de que Europa debía ser menos dependiente de otras regiones del mundo y debía perseguir la «autonomía estratégica». «Sé que todavía hay desafíos, pero en ese aspecto hemos avanzado más en los últimos cinco años, debido a la sucesión de crisis, que en los últimos treinta años», afirma Michel con confianza en una entrevista con The European Newsroom, la colaboración entre agencias de noticias a la que también pertenece Belga.
Michel se refiere, entre otras cosas, a la respuesta europea a la pandemia de coronavirus y la invasión rusa de Ucrania. Sin embargo, todavía existe la sensación de que la seguridad europea está en manos de los votantes estadounidenses en los estados indecisos, pero según Michel, la Unión Europea no debería esperar con temor quién será el próximo ocupante de la Casa Blanca. «No quiero que mis hijos o nietos dependan de quién sea el próximo presidente de los EE. UU., China o Rusia. Quiero que mantengan el control sobre su destino porque en Europa decidimos por nosotros mismos sobre nuestro futuro».
Michel tampoco está tan seguro de que una victoria de Donald Trump o Kamala Harris marque una gran diferencia para ciertas políticas de Washington a largo plazo. Se refiere, entre otras cosas, al proteccionismo al otro lado del Océano Atlántico y al enfoque en China. «Por supuesto que hay diferencias entre Trump y Harris, especialmente a corto plazo, pero ¿estamos seguros de que la orientación a largo plazo será tan diferente para las relaciones entre la Unión Europea y los Estados Unidos?»
El mandato de Charles Michel expira a finales de noviembre. A partir de diciembre, el ex primer ministro portugués Antonio Costa asumirá la presidencia del Consejo Europeo.
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