Bruselas – La política agrícola de la UE debe cambiar, y ya. Eso opina al menos el propio sector en un informe contundente en Bruselas.
El informe se ha elaborado como respuesta a las numerosas protestas de agricultores durante el invierno y la primavera en toda Europa.
El trabajo ha sido dirigido por el profesor alemán Peter Strohschneider e involucró principalmente a diversas organizaciones agrícolas y alimentarias, pero también al Banco Europeo de Inversiones y al grupo ambiental Birdlife.
Dos suecos han formado parte del equipo que redactó el informe: el profesor Uno Svedin de la organización de investigación Euragri y Lennart Nilsson de la organización de productores Cogeca.
El informe se resume en diez directrices y 14 recomendaciones sobre todo, desde la cooperación ampliada entre los agricultores y el apoyo transitorio a la producción sostenible hasta el enfoque en un consumo más saludable y mejores condiciones laborales.
La idea es que el informe contribuya a una nueva «visión» para las zonas rurales que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha prometido dentro de los 100 días desde que asuma la próxima Comisión Europea este otoño.
(4 de septiembre)