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Bruselas – El partido europeo de ultraderecha Identidad y Democracia (ID) no estará representado en el debate en el Parlamento Europeo de cara a las elecciones del próximo 9 de junio porque la Unión Europea de Radiodifusión (UER), organizadora del evento, considera que no han designado de forma oficial a un cabeza de lista o candidato principal a estos comicios.

El Parlamento Europeo comunicó este martes los nombres de los participantes en este debate, que se celebrará el próximo jueves 23 en el hemiciclo de la Eurocámara y contará con la alemana Ursula von der Leyen (Partido Popular Europeo), el luxemburgués Nicolas Schmit (Partido de los Socialistas Europeos), el italiano Sandro Gozi (Renovar Europa), la alemana Terry Reintke (Verdes) y el austríaco Walter Baier (Izquierda Europea).

Esta lista para el denominado «Debate de Eurovisión» excluye al representante de ID Andreas Vistisen, que sí participó en el debate que organizó el medio de información europea Politico junto a la Universidad de Maastricht (Países Bajos) el pasado 29 de abril.
Tampoco figura nadie del grupo ultraconservador, ECR, aunque ellos optaron ya por no enviar a ningún representante al debate en Maastricht.

La UER alega que Vistisen no es seleccionable para participar en el debate porque no ha sido designado de manera oficial por ID para ser su cabeza de lista o candidato principal a estas elecciones porque, «como ya lo fue en 2014 y 2019, el debate de Eurovisión es un foro para los candidatos principales para el puesto de presidente de la Comisión Europea».

«Las invitaciones que se enviaron a los partidos de los siete grupos políticos del Parlamento Europeo dejaban esto claro. Cinco partidos contestaron y han nominado a un candidato principal. Dos partidos, ECR e ID, declinaron nominar a un candidato principal y por tanto se han convertido a sí mismos en no seleccionables para este debate en concreto», explicó una portavoz de la UER a EFE.

El sistema de cabezas de lista para las elecciones europeas prevé que el candidato a presidir la Comisión Europea, que nominan los jefes de Estado y de Gobierno europeos, salga de la terna de nombres que propongan los partidos europeos antes de la campaña electoral, para reforzar la legitimidad del cargo y que los votantes hayan visto a esa persona en debates y eventos de la propia campaña.

El sistema, que no es vinculante, funcionó en 2014, cuando se nominó como presidente de la Comisión Europea al luxemburgués Jean-Claude Juncker, que había sido candidato del Partido Popular Europeo (PPE); en 2019, sin embargo, los jefes de Estado y de Gobierno ignoraron los nombres propuestos por los partidos y plantearon a la alemana Von der Leyen, que no había hecho campaña y era una relativa desconocida en Bruselas.

Este año, Von der Leyen sí es la candidata del PPE pero esto ni le asegura la nominación ni garantiza que, si es finalmente elegida, sea porque se ha respetado este sistema.

Tanto ECR como ID están en contra de este concepto porque creen que, de convertirse en vinculante, permitiría que el Parlamento Europeo se exceda en las competencias que le otorgan los tratados en el proceso de selección del presidente de la Comisión Europea.
En su cuenta de X, Vistisen criticó que la decisión como «tocar fondo de nuevo en cuanto a los estándares democráticos» y avisó de que excluye a una cuarta parte del electorado europeo, cifra que las encuestas atribuyen a opciones ultraconservadoras y de extrema derecha en las próximas elecciones al Parlamento Europeo.

Esta es la segunda polémica en pocos días de la UER en Bruselas, después de que su veto a las banderas de la Unión Europea en el festival de Eurovisión el pasado sábado por considerarlas símbolos políticos haya causado malestar en la Comisión Europea.

El vicepresidente de la Comisión Europea Margaritis Schinas ha pedido explicaciones y responsabilidades a los organizadores del festival y ha insistido en que deben llegar antes de la celebración del debate del próximo jueves. (14 de mayo)

La responsabilidad editorial de esta publicación es de EFE.