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Estocolmo – El miércoles y jueves, el primer ministro de Suecia Ulf Kristersson ha invitado a colegas nórdicos y bálticos a Harpsund, la residencia de recreo del primer ministro, y también está entre los invitados el primer ministro de Polonia Donald Tusk.
Tusk viaja ahora por Europa para asegurar el apoyo continuo a Ucrania y prepararse para la toma de posesión de la administración de Donald Trump en EE. UU. el 20 de enero.
Hay varias razones por las que Tusk está tomando la iniciativa ahora. Además de que Polonia es vecina de Ucrania y está notablemente afectada por la guerra, Alemania y Francia, quienes usualmente impulsan a la UE, están ocupados con crisis políticas internas.
Además, Polonia asumirá la presidencia de la UE el 1 de enero. Las frenéticas actividades de Tusk pueden verse como un inicio informal de la presidencia, para ganar tiempo.
En Harpsund, Tusk se encontrará con colegas que comparten su opinión sobre la importancia del apoyo continuo a Ucrania. Y también ha tenido o tendrá reuniones con el nuevo secretario general de la OTAN Mark Rutte, el primer ministro del Reino Unido Keir Starmer y el presidente de Francia Emmanuel Macron.
Además, la próxima jefa de política exterior de la UE será la estonia Kaja Kallas, una crítica declarada de Rusia y amiga de Ucrania.
En la lista de méritos de Donald Tusk también está el hecho de que ya sabe cómo es negociar con Trump. La última vez que Trump fue elegido presidente, Tusk era presidente del Consejo Europeo.
(25 de noviembre)
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