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«Esta es la cantidad máxima permitida por el FSUE como anticipo», indicó la Comisión en un comunicado.
Bruselas precisó que está evaluando la solicitud oficial sobre los daños relacionados con la dana, presentada el pasado enero por España y que, una vez concluida esa evaluación, la Comisión «presentará una propuesta sobre el importe total que se concederá» con cargo al Fondo de Solidaridad.
«Normalmente la Comisión tarda unos meses en hacer esa evaluación. Solo después se podrá hacer la propuesta sobre la suma total, que a continuación irá a las autoridades presupuestarias, es decir, al Consejo y al Parlamento Europeos y ahí se tomará la decisión final», explicó en la rueda de prensa diaria del Ejecutivo comunitario el portavoz comunitario de Cohesión, Maciej Berestecki.
El vicepresidente ejecutivo de Cohesión y Reformas, Raffaele Fitto, dijo en un comunicado que la Dana «causó una profunda devastación en Valencia, con cientos de muertos y numerosas viviendas e infraestructuras destruidas» y subrayó que se mantiene firme el compromiso de la UE «de apoyar a la población y a la región durante esta difícil recuperación».
El Fondo de Solidaridad de la UE es un instrumento de ayuda posterior a desastres que proporciona apoyo financiero a los Estados miembros de la Unión Europea y a los países candidatos para sus esfuerzos de recuperación tras catástrofes naturales graves.
Su financiación puede utilizarse para restaurar infraestructuras esenciales como los sistemas de energía, agua, salud, educación o telecomunicaciones, así como para medidas de protección del patrimonio cultural o para operaciones de limpieza.
La concesión de un anticipo no prejuzga el importe final de la ayuda del Fondo de Solidaridad, que dependerá de la evaluación de la solicitud de España por parte de la Comisión y de la disponibilidad presupuestaria, precisó hoy Bruselas.
El Ministerio español de Hacienda remitió el pasado 20 de enero la documentación necesaria para acogerse al Fondo de Solidaridad de la Unión Europea a raíz de los daños ocasionados por la dana.
El mismo Ministerio precisó entonces que los gastos susceptibles de recibir recursos del fondo europeo eran, entre otros, los destinados al establecimiento de las infraestructuras básicas, como la energía, el agua, la sanidad y la educación, los alojamientos temporales y costes de los servicios de urgencias y la seguridad de las infraestructuras de prevención.
En particular, se incluyó el detalle de los gastos que cumplían los requisitos para ser financiados con el Fondo de Solidaridad y que ascendían a 4.404 millones de euros, cifra que el propio Ministerio precisó que «podría sufrir variaciones a la baja en el caso de que algunos de los gastos elegibles reciban financiación del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia». (31 de marzo)
La responsabilidad editorial de esta publicación es de EFE.