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Bruselas/Bratislava – Podemos detener toda la ayuda humanitaria a Ucrania, decidir una reducción significativa o retirada completa de los beneficios para los refugiados militares ucranianos en Eslovaquia o detener el suministro de electricidad en situaciones de emergencia. A nivel político, la República Eslovaca puede utilizar el derecho de veto en varias decisiones de la UE. El primer ministro eslovaco Robert Fico (Smer-SD) insinuó el jueves en Bruselas, después de conversaciones con representantes de la Comisión Europea (CE), posibles medidas recíprocas contra Kiev por detener el tránsito de gas natural ruso, informa el enviado especial de TASR.

Sin embargo, según el primer ministro, la República Eslovaca tomará estas medidas solo si no tiene otra opción. Según él, se trata de una oportunidad para mostrar cómo debe comportarse el líder de un país soberano.

El primer ministro enfatizó que las negociaciones con la parte ucraniana estuvieron cerca de un acuerdo. «Desde un punto de vista técnico, la parte ucraniana estaba preparada para muchas posibilidades», añadió. Por lo tanto, le sorprendió el anuncio del presidente de Ucrania Volodymyr Zelenski, que por primera vez formuló en la reunión del Consejo Europeo, donde rechazó categóricamente cualquier tránsito de gas a través del territorio de Ucrania.

Fico también anunció en una conferencia de prensa que inmediatamente se creará un grupo para resolver la disputa actual, que incluirá representantes de Eslovaquia, la Comisión Europea (CE) y probablemente también Ucrania. «Es un problema serio y también lo reconoce el comisario de energía Dan Jörgensen», con quien la delegación del gobierno eslovaco mantuvo conversaciones, dijo el primer ministro. Apreció las «conversaciones constructivas» del jueves con la CE, que, según él, tiene un gran interés en resolver el problema.

Fico también se refirió a una carta enviada a la CE, según la cual supuestamente no existen obstáculos legales o sancionadores que amenacen el tránsito de gas ruso a Europa. Repitió que la decisión del presidente ucraniano Volodymyr Zelenski es puramente política y tendrá un gran impacto en el aumento de los precios del gas y en la competitividad de la UE.

Las negociaciones originales debían llevarse a cabo en Bruselas el martes, con la participación de la delegación ucraniana. Sin embargo, la Eurocomisión las canceló, según el comunicado de la Oficina del Gobierno de la República Eslovaca, debido a la falta de asistencia de la parte ucraniana y las reprogramó para el jueves.

A finales de 2024, expiró el contrato de tránsito de gas natural ruso a través del territorio de Ucrania. Kiev decidió no renovar el contrato. Fico advirtió repetidamente sobre la pérdida de quinientos millones de euros anuales para Eslovaquia y calculó la carga financiera para la Unión Europea en su conjunto en 60 a 70 mil millones de euros. (9 de enero)

«Es un problema serio y también lo reconoce el comisario de energía Dan Jörgensen.» Robert Fico

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