Bratislava – El Ministro de Medio Ambiente Tomáš Taraba (SNS) lideró la delegación eslovaca en las negociaciones en Bratislava con la delegación húngara encabezada por el Ministro de Energía Csaba Lantos sobre la finalización de una disputa de 30 años relacionada con la construcción del Sistema de Obras Hidráulicas Gabčíkovo – Nagymaros. TASR fue informado por el departamento de comunicación del Ministerio de Medio Ambiente de la República Eslovaca.
En las negociaciones también participaron el director general de la empresa estatal de construcción hidráulica Peter Molda y el director general de la empresa energética húngara MVM Gábor Orbán.
«En menos de medio año ya se han llevado a cabo siete negociaciones bilaterales de los comisionados gubernamentales, delegaciones y expertos,» señaló el departamento de medio ambiente. Ambas partes coincidieron en que es necesario armonizar la situación actual con el estado legal y encontrar una solución mutuamente beneficiosa que garantice la protección contra inundaciones y la navegación tanto internacional como recreativa y deportiva. También contribuirá a mejorar las condiciones ambientales y aumentará el uso energético del potencial hídrico del Danubio en la Central Hidroeléctrica Gabčíkovo.
«Como buenos vecinos queremos resolver la disputa con respeto mutuo, buenas relaciones, pero de forma que ambos estados encuentren una solución permanentemente aceptable, lo cual solo creará la base para un mayor impulso de la cooperación en otras áreas. La dinámica y el alcance de las negociaciones de hoy solo confirman que ambas partes quieren llegar a un acuerdo y en un futuro cercano presentar a los gobiernos los puntos de convergencia básicos para una posible preparación de un nuevo acuerdo internacional,» explicó el ministro Taraba.
El Tribunal Internacional de Justicia en La Haya emitió el 25 de septiembre de 1997 una sentencia en la disputa entre Hungría y la República Eslovaca sobre la construcción y el uso del Sistema de Obras Hidráulicas Gabčíkovo-Nagymaros (SVDGN). El tribunal confirmó la validez del tratado de 1977, la sucesión de la República Eslovaca tras la República Federativa Checa y Eslovaca (CSFR) y declaró legítima la construcción de una solución alternativa (nivel de Čunovo). El tribunal resolvió que ambas partes, en interés de armonizar el desarrollo económico con la protección del medio ambiente, deberían examinar nuevamente los efectos del uso de la central hidroeléctrica Gabčíkovo sobre el medio ambiente. (27 de agosto)