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Praga – El futuro de la siderurgia en la República Checa y en los países de la Unión Europea es incierto. El sector podría continuar disminuyendo o dejar completamente de existir en su forma actual. Esto se desprende de las declaraciones de expertos, que ČTK tiene a disposición. Según ellos, la siderurgia se ve afectada negativamente no solo por la desaceleración general de la economía europea, sino también por la baja demanda, los altos precios de la energía, la presión por una producción más ecológica y la importación de acero barato de Asia. Un respiro para el sector puede ser el creciente interés por fortalecer la industria armamentista, pero los expertos consideran que debido a esto quizás no sea necesario que el acero se produzca en la propia República Checa.
«La desafiante situación en la siderurgia se debe al desarrollo persistentemente desfavorable de la demanda de productos de acero en la UE. La crisis en la construcción y en otros sectores de clientes, como la ingeniería o la automoción, se refleja negativamente en la producción total de acero», dijo el presidente del consejo de vigilancia de la Unión Siderúrgica y director general de las Siderurgias de Třinec Roman Heide. Según él, la competitividad de los fabricantes europeos sigue amenazada también por los altos precios de la energía o las importaciones baratas de terceros países. «El creciente porcentaje de importaciones en el consumo total de acero en la UE representa uno de los principales problemas de la siderurgia europea», afirmó. En caso de que la UE no cambie las medidas referentes al acero, la competitividad de los fabricantes seguirá amenazada según Heide. «Esto podría llevar hasta la desaparición de todo el sector en la UE tal como lo conocemos ahora», añadió.
El analista de la plataforma de inversiones XTB Jiří Tyleček actualmente no ve un desarrollo positivo en el sector. Según él, aunque la presión para incrementar la producción en la industria de defensa podría ayudar a aumentar la demanda de acero, si no se resuelve el problema de la energía cara, todo el sector seguirá disminuyendo a largo plazo, opina. «Un cierto efecto positivo puede traer la modernización, pero debido a la producción más cara en comparación con China y otros países baratos, el acero ecológico solo se impondrá con dificultad sin subvenciones», indicó Tyleček.
Según el analista del portal Capitalinked.com Radim Dohnal, actualmente surge la pregunta de si debería existir en la República Checa la producción primaria de acero en bruto, ya que no se extrae mineral de hierro en la República Checa. «En Dinamarca no se produce acero primario desde hace años, y sin embargo tienen fabricantes de armas de primer nivel. Si logra funcionar un mercado único sin obstáculos en la UE, entonces probablemente incluso para una mayor fabricación de armas en la República Checa bastará con tener solo una producción secundaria de acero en el territorio y reforzarla», explicó Dohnal. (23 de marzo)