Bratislava – Espontánea, amistosa y rica en contenido. Así fue, según el presidente del gobierno de la República Eslovaca, Robert Fico (Smer-SD), la reunión del martes con el primer ministro húngaro Viktor Orbán en Bratislava, durante la cual también hablaron sobre la situación en la UE. El primer ministro invitó a Orbán a una visita oficial a Eslovaquia el 19 de marzo para marcar el 30º aniversario del Tratado de Buena Vecindad y Cooperación Amistosa entre la República Eslovaca y Hungría, informa TASR.
«Estoy contento de que la calidad de las relaciones eslovaco-húngaras esté actualmente en el nivel más alto posible, la convivencia húngaro-eslovaca no es un tema político. Encontramos un punto de vista común no solo sobre los acontecimientos en nuestros países, sino también en la escena internacional», afirmó Fico. Describió la reunión con Orbán como espontánea, amistosa y temáticamente muy rica. «Hablamos sobre la situación actual en la Unión Europea, mencionamos los primeros pasos del presidente americano Donald Trump», dijo Fico.
Añadió en este contexto que en muchas declaraciones y opiniones, por ejemplo, sobre cuestiones de migración o familia, se identifica con el nuevo jefe de la Casa Blanca.
Fico informó a Orbán sobre las cuestiones políticas internas actuales de la República Eslovaca, incluida la actividad de la oposición y su crítica a la posición del gobierno en cuestiones de política internacional. «También aquí, en esta reunión, enfatizo que nuestro espacio vital es la UE y la OTAN, pero tenemos el derecho de ser críticos», enfatizó el primer ministro. Añadió que ambos gobiernos son conscientes de la responsabilidad de preparar sus países para diversos desarrollos que puedan ocurrir en la Unión. También informó a Orbán sobre los últimos pasos planificados del gobierno, incluida la garantía constitucional de solo dos géneros: masculino y femenino.
El primer ministro húngaro estuvo de acuerdo con la evaluación de la alta calidad de las relaciones entre ambos países, y también destacó que ambos países son miembros de la UE y la OTAN. «Y así seguirá siendo», subrayó. Sin embargo, comparte la misma opinión sobre el desarrollo dinámico en el mundo y en Europa. Incluso cree que con el regreso de Trump al cargo de presidente estadounidense, Eslovaquia y Hungría se están uniendo a la corriente principal del pensamiento del mundo occidental.
«El mundo occidental se sostiene sobre dos piernas, la europea y la americana, y con las opiniones sobre migración o familia que formuló el nuevo presidente estadounidense y que coinciden con nuestras opiniones, nos estamos convirtiendo en parte del pensamiento dominante del mundo occidental», dijo Orbán. Reiteró que Hungría tiene interés en la conclusión más temprana posible de la guerra en Ucrania, censuró los planes para prolongar el conflicto, y también criticó las sanciones contra Rusia, que dañan los intereses de los países miembros de la UE, incluidos Hungría y Eslovaquia. «Por eso, por ejemplo, nos alegra que el señor Fico haya alzado la voz criticando la cancelación del tránsito de gas a través de Ucrania y haya señalado el impacto negativo de este paso en Europa», añadió. También apoyó a Fico en su esfuerzo por restaurar el tránsito.
Ambos primeros ministros apoyaron los esfuerzos de Ucrania para unirse a la UE, pero enfatizaron que la integración debe tener lugar de acuerdo con las condiciones que deben cumplirse. Ambos rechazaron el ingreso de Ucrania en la OTAN. (21 de enero)