Skopje – El estado se encuentra en la encrucijada entre el viejo sistema y el nuevo futuro europeo. El plan de crecimiento y la Agenda de Reformas no son solo condiciones para la integración. Son instrumentos para la sanación de nuestra sociedad. Las integraciones y el crecimiento son nuestra brújula, pero las reformas deben ser nuestras decisiones, nuestras políticas, nuestro madurar nacional. La corrupción es un problema sistémico, no una desviación individual, destacó hoy el primer ministro Christian Mitskoski en la Mesa Redonda sobre los desafíos y beneficios del Plan de Crecimiento para los Balcanes Occidentales.
Mitskoski dijo que la corrupción en nuestro país no es solo un fenómeno, sino parte de la forma en que funcionan ciertas partes de la sociedad y un sistema que se protege a sí mismo.
– Si queremos estar en la Unión Europea, si queremos crecimiento, debemos derribar ese sistema. Tenemos situaciones heredadas en las que el ciudadano se siente menospreciado, impotente, obligado a «pagar para recibir» – ya sea por atención médica, protección legal o algún servicio administrativo. Un estado así no puede avanzar, dijo el primer ministro.
Según él, es aún más preocupante que las instituciones que deben luchar contra la corrupción – la fiscalía y el poder judicial – a menudo son mudas, ineficaces o están bajo influencia política.
Mitskoski dijo que las reformas en el sector judicial son las más urgentes y que sin ellas, todas las demás reformas son inútiles.
En la Mesa Redonda que se lleva a cabo en el Gobierno también hablaron el ministro de asuntos europeos Orhan Murtezani, el embajador de Suecia en Macedonia del Norte Ami Larson Jain y Vladimir Drobnyak, exjefe negociador de las negociaciones de adhesión de Croacia a la Unión Europea. (23 de abril de 2025)