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BRUSELAS – Polonia tiene la presidencia rotativa de la Unión Europea desde el cambio de año durante seis meses y con ello puede influir en la agenda europea. Un cambio de guardia que, según diplomáticos en Bruselas, se anticipaba con expectativa. Los últimos seis meses bajo el liderazgo húngaro estuvieron marcados por provocaciones y disputas.
El primer ministro húngaro Viktor Orbán viajó a Rusia una semana después del inicio de la presidencia húngara y luego visitó China en su autoproclamada misión de paz. Esto provocó reacciones airadas entre los líderes europeos, quienes enfatizaron que el húngaro no representaba a la UE. La Comisión Europea decidió boicotear las reuniones en Hungría como protesta y también los ministros europeos se negaron a viajar a Budapest.
Polonia fue durante mucho tiempo el principal aliado de Hungría dentro de la UE, pero el país ha tenido un gobierno pro-europeo bajo el liderazgo de Donald Tusk desde hace más de un año. Él ha dicho que la seguridad será la máxima prioridad en los próximos seis meses. Polonia es un importante aliado de Ucrania, se opone a la influencia rusa y gasta mucho dinero en defensa.
1 de enero de 2025
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