cs flag go to the original language article
This article has been translated by Artificial Intelligence (AI). The news agency is not responsible for the content of the translated article. The original was published by CTK.

«`html

Praha – La automovilística Škoda Auto propone que el marco regulatorio para la industria automotriz permita, además de la transición a los automóviles eléctricos, el posible uso de híbridos enchufables o combustibles alternativos. Después de una reunión con el ministro de Industria y Comercio Lukášem Vlčkem (STAN), lo declaró el presidente de la junta directiva de Škoda Auto Klaus Zellmer. El plan vigente de la UE prevé una reducción paulatina de los límites de emisión para los vehículos fabricados y una prohibición total de los motores de combustión a partir de 2035.

«Vemos que los clientes aún desean tener la opción de elegir entre varias variantes de propulsión. Para seguir teniendo éxito económico, debemos respetar estas preferencias de los clientes y mantener abiertas las opciones tecnológicas en el camino hacia la descarbonización de la flota de vehículos europea. Con el fin de alcanzar este objetivo, deberíamos explorar activamente otras opciones, incluyendo los híbridos enchufables y los combustibles alternativos, que deberían tenerse en cuenta en el marco regulatorio», declaró Zellmer en un comunicado de prensa.

La República Checa, junto con Italia, pidió al final del año pasado a la UE acelerar la evaluación de la viabilidad del objetivo de prohibir la venta de coches con motores de combustión a partir de 2035. Otro punto de la propuesta conjunta checo-italiana es también la necesidad urgente de abordar la amenaza de las multas por incumplimiento del objetivo de emisión vigente para 2025. «El aplazamiento de la revisión de los límites de emisión al año 2025 (desde el año 2026) y el alivio temporal de las sanciones es un paso que brindará a los fabricantes europeos el tiempo necesario para adaptarse, al tiempo que fomentará la inversión en innovación y tecnologías sostenibles. Nuestro objetivo es garantizar que la transición a una movilidad más ecológica no sea en detrimento de la competitividad y los empleos», señaló el subsecretario del Ministerio de Industria y Comercio Štěpán Hofman.

La regulación de CO₂ se estableció, según el miembro de la junta directiva de Škoda y presidente de la Asociación de la Industria Automotriz, Martina Jahna, bajo condiciones diferentes y los fabricantes han hecho todos los esfuerzos por cumplirlas. «El año 2025 será extremadamente desafiante y es necesario buscar flexibilidad para evitar sanciones que ralenticen la transformación. Además, debemos reconsiderar la política industrial con el fin de reducir los costes de fabricación, específicamente los precios de la energía, fomentar la demanda en el mercado y motivar a los fabricantes de automóviles a realizar más inversiones en nuevas tecnologías, especialmente en consideración a la competencia extranjera», añadió Jahn.

La industria automotriz checa emplea directa e indirectamente a casi medio millón de personas, contribuye con un 24% de las exportaciones de la República Checa y constituye el nueve por ciento de su PIB. La industria automotriz también es crucial para la economía europea, empleando a más de 13 millones de personas y aportando al 6,8% del empleo total en la UE. (10 de enero)

«`