Bruselas – Diecinueve Estados miembros de la Unión Europea encabezados por Bélgica, junto con el país no miembro Noruega, están trabajando para el regreso voluntario o forzado de inmigrantes afganos que no cumplen con los requisitos para residir, o que enfrentan cargos penales. Esto se desprende de una carta al comisario europeo Magnus Brunner, que fue destacada por el portal Euractiv. Entre los firmantes de las veinte gobiernos se encuentra también el ministro del Interior checo Vít Rakušan.
«Es hora de una respuesta decidida y coordinada, para que la UE pueda recuperar el control sobre la migración y nuestra seguridad», dijo a Euractiv la ministra belga de asilo y migración Anneleen Van Bossuyt. Además de Chequia y Bélgica, entre los firmantes también se encuentran representantes de Bulgaria, Estonia, Finlandia, Irlanda, Italia, Chipre, Lituania, Luxemburgo, Hungría, Malta, Alemania, Países Bajos, Polonia, Austria, Grecia, Eslovaquia y Suecia. La ministra de Justicia noruega Astri Aasová-Hansen, cuyo país no es miembro de la UE, pero está estrechamente vinculado a la unión, incluida el espacio Schengen sin fronteras internas, también firmó la carta.
Los países solicitan urgentemente a la Comisión Europea (CE) que permita el regreso de afganos que no tienen derecho legal a residir en la UE, especialmente si se les considera una amenaza para el orden público. La carta también llama a una coordinación más estrecha entre la CE, el Servicio Europeo de Acción Exterior y los países de la UE dispuestos. También propone una misión conjunta de la UE en Afganistán. Afirma que la UE ya no puede permitirse la inacción.
Los países también proponen que la agencia fronteriza de la UE, Frontex, participe más en la organización del regreso a través de un programa de reintegración de la UE. Actualmente, los gobiernos cubren los costos por sí mismos, lo que, según la carta, ha llevado a un procedimiento fragmentado y costoso. El mandato de la agencia Frontex se revisará en 2026. (18 de octubre)