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Bruselas – La comisionada Jessika Roswall dio positivo en seis de los 13 PFAS analizados, de los cuales tres se consideran tóxicos para la salud reproductiva, y por encima del umbral recomendado para algunos de estos contaminantes, indicó su equipo.
« No soy una excepción (…) los resultados me demuestran que tengo PFAS en mi sangre, en particular productos tóxicos para la salud reproductiva », declaró la comisionada, al margen de una conferencia de prensa sobre el estado de la naturaleza en Europa.
Los PFAS, o sustancias per- y polifluoroalquiladas, son una familia de productos químicos sintéticos que tardan muchísimo en descomponerse.
Utilizados en numerosos objetos (textiles, envases de alimentos, utensilios de cocina, cosméticos…) por sus propiedades antiadherentes, impermeabilizantes o su resistencia al calor, pueden tener efectos perjudiciales: aumento del colesterol, cánceres, efectos sobre la fertilidad y los fetos…
La UE planea presentar en 2026 una propuesta de prohibición de los PFAS en productos de consumo cotidiano. (29 de septiembre de 2025)