Bruselas (ANSA) – El caso esloveno corre el riesgo de retrasar aún más la presentación de la nueva Comisión por parte de Ursula von der Leyen. Mañana, en Ljubljana, se espera la votación de la comisión parlamentaria local sobre la nueva candidata a la Comisión, Marta Kos, elegida por el primer ministro Robert Golob después de la retirada de Tomaz Vesel. Sin embargo, la comisión está presidida por el partido (Sds) del ex primer ministro Janez Jansa, que pertenece al Partido Popular pero que desde hace tiempo se ha posicionado como euroescéptico y ciertamente anti-von der Leyen.
Y el partido podría negarse a calendarizar la votación de la comisión parlamentaria, retrasando así aún más la formalización de los candidatos. La delegación eslovena del PPE, que votó en contra de von der Leyen como Sptizenkandidat, anunció en las últimas horas que no apoyará al candidato elegido por su propio gobierno. Sin embargo, el descontento también afecta a la delegación eslovena en el grupo socialista, que ha presentado una solicitud de acceso a los documentos para obtener información sobre el verdadero motivo de la retirada de Vesel.
«En consideración de la grave falta de información en la opinión pública eslovena sobre el proceso de nominación del nuevo comisionado y de la no divulgación de documentos oficiales por parte del gobierno de la República de Eslovenia, lo que refuerza aún más la desconfianza en el proceso, solicito formalmente a la Comisión Europea que publique todos los documentos relativos a la nominación del comisionado esloveno de este año que han sido intercambiados entre la Comisión Europea y el gobierno de la República de Eslovenia», anunció el eurodiputado Milan Zver (12 de septiembre).