Un plan de acción energético asequible para la Unión Europea ahorrará 45.000 millones de euros hasta 2026, afirmó el Comisario europeo de Energía, Dan Jørgensen, a European Newsroom (enr) en una entrevista publicada el miércoles.
La Comisión también ha calculado que los ahorros creados por el plan seguirán aumentando y que para 2030 es posible conseguir un ahorro anual de 130.000 millones de euros, cifra que aumentará a 260.000 millones de euros para 2040, dijo Jørgensen.
«Así que son cantidades enormes, no son poca cosa», enfatizó. Añadió que esto supone un promedio de 200 euros al año por hogar.
El plan forma parte del Clean Industrial Deal, una estrategia de la UE para reactivar la industria europea sin renunciar a sus objetivos climáticos y fomentar las inversiones en descarbonización y tecnologías limpias en la Unión Europea.
Una de las medidas inmediatas que deben tomar los estados miembros de la UE es reducir los impuestos que pagan las industrias con uso intensivo de energía sobre la electricidad y eliminar los gravámenes que financian políticas no energéticas.
Para garantizar la estabilidad de precios para las empresas, la Comisión también flexibilizará las normas sobre ayudas estatales para permitir que los países de la UE subvencionen a las empresas industriales.
La Comisión también quiere abordar los cuellos de botella y los retrasos en el proceso de permisos y ayudar al sector industrial a cambiar a fuentes de energía más limpias.
A largo plazo, la Comisión trabajará con los países de la UE para aumentar drásticamente las inversiones en redes energéticas, energías renovables y capacidad de almacenamiento de energía.
En otra medida de futuro, Bruselas está desplazando el enfoque del bloque hacia contratos de electricidad a más largo plazo para contrarrestar las fluctuaciones de precios.
Gran parte de la responsabilidad de la reducción de las facturas energéticas recae en los países de la UE, ya que la fiscalidad, por ejemplo, es competencia de cada Estado y una buena forma de obtener ingresos. Por lo tanto, gran parte del éxito del plan depende de los miembros del bloque y de su disposición a cooperar con las recomendaciones de la Comisión.
Jørgensen dijo que estaba dispuesto a tomar medidas él mismo y considerar una nueva legislación para reducir los precios de la energía si los estados miembros de la UE «no implementan las recomendaciones», destacando los impuestos a la electricidad como ejemplo.
La retroalimentación de la industria es positiva
Los grupos de presión del sector llevan mucho tiempo presionando a la Comisión para que aborde los altos precios de la energía y reduzca los costes empresariales. Business Europe afirmó que el plan de acción era un paso en la dirección correcta, pero que la Comisión ahora debe predicar con el ejemplo para reducir los precios de la energía.
Sin embargo, Jørgensen se mostró satisfecho de que la industria privada respaldara las medidas y describió la respuesta de los líderes empresariales como «muy, muy positiva».
Este artículo se publica dos veces por semana. El contenido se basa en noticias de agencias participantes en el programa .