Bruselas quiere permisos más rápidos para proyectos de electricidad

BRUSELAS –  Con ello, la Comisión espera lograr más espacio en las redes eléctricas y precios de la energía más bajos.

Los Estados miembros habían acordado interconectar sus redes eléctricas un 15 por ciento más entre sí para 2030. Muchos Estados miembros parecen no lograrlo. Por eso hay que darse prisa.

Bruselas ya ha identificado dónde se encuentran los mayores cuellos de botella en la red eléctrica europea. Por ejemplo, en Alemania, donde gran parte de la infraestructura obsoleta no está preparada para toda la electricidad generada. También en Europa del Este las redes eléctricas deben estar mejor interconectadas. Esto también se aplica a España y Francia. Esta conexión eléctrica inestable provocó en junio un gran apagón en España y Portugal.

A principios de diciembre, la Comisión designó 235 proyectos energéticos transfronterizos que pueden aliviar los cuellos de botella. Recibirán financiación de la UE y permisos acelerados. Bruselas quiere poder otorgar ese estatus a más proyectos. La Comisión quiere coordinar esto con los Estados miembros, pero si un cuello de botella no es abordado por los propios países, la Comisión quiere poder intervenir.

También deben simplificarse las normas de protección de la naturaleza en torno a la concesión de permisos para la construcción de proyectos energéticos. Los proyectos energéticos que tienen poco impacto en la naturaleza, como la renovación de aerogeneradores o cables eléctricos ya existentes, deben obtener permisos más rápidamente.

Además, Bruselas quiere que los costes se compartan mejor. Los Estados miembros que se beneficien ambos de una conexión eléctrica en un Estado miembro, por ejemplo de un parque eólico, deben pagar ambos por ella.

La Comisión ha calculado que se necesitan 1,2 billones de euros hasta 2040 para las redes eléctricas. Una mejor integración ahorrará unos 40.000 millones, calculó Bruselas. La Comisión quiere aumentar en el marco financiero plurianual (2028-2034) el presupuesto energético de algo más de 5.000 millones a casi 30.000 millones de euros.

Los Estados miembros y el Parlamento Europeo van a examinar ahora la propuesta.

(10 de diciembre de 2025)