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Washington emitió el martes una prohibición de entrada contra Breton, uno de los motores detrás de la ley europea de servicios digitales (DSA), y cuatro representantes de ONG que trabajan en la lucha contra la desinformación y los mensajes de odio en línea. Según el gobierno estadounidense, estarían «censurando» a empresas estadounidenses.

«La Unión Europea es un mercado interior abierto y basado en normas, con el derecho soberano de regular las actividades económicas de conformidad con nuestros valores democráticos y obligaciones internacionales», reaccionó la Comisión un día después en un comunicado.

La Comisión ha pedido «aclaraciones» a las autoridades estadounidenses. «Si es necesario, reaccionaremos de forma rápida y contundente para defender nuestra autonomía regulatoria frente a medidas injustificadas», advierte el órgano ejecutivo diario de la UE.

Y la Comisión recuerda que la libertad de expresión «es un derecho fundamental en Europa y un valor central compartido con Estados Unidos». Señala que sus normas digitales «garantizan un terreno de juego seguro, justo e igualitario para todas las empresas, que se aplica de manera equitativa y sin discriminación».

Varios países europeos, entre ellos Francia, el país de origen de Breton, condenaron la decisión. Así, el presidente francés Emmanuel Macron aseguró en X que los europeos seguirán defendiendo su «soberanía digital» y su «autonomía regulatoria». En Alemania, de donde son originarias las directoras de HateAid Josephine Ballon y Anna-Lena von Hodenberg, que también se ven afectadas por la prohibición de entrada, se afirmó que las medidas de Washington «demuestran que el compromiso social resulta incómodo para las plataformas poderosas».

El ministro belga de Asuntos Exteriores Maxime Prévot reaccionó el miércoles «consternado». «Esta legislación europea, que cuenta con el apoyo de todos los Estados miembros, no es un acto de hostilidad hacia Estados Unidos», afirmó. Según él, la ley debe garantizar que en línea rijan las mismas normas de seguridad y dignidad que en la vida real. «Es inaceptable sancionar a personas sobre la base de frustraciones económicas en Estados Unidos», considera el ministro. Prévot subrayó que la Unión Europea «mantendrá el derecho soberano» de «preservar sus valores y proteger a los ciudadanos».

(Bruselas, 24 de diciembre de 2025)