Estocolmo – Cuando la Agencia Sueca de Seguridad Eléctrica revisó una veintena de productos de empresas que afirmaban operar dentro de la UE, resultó que todos los productos eran peligrosos de usar. Todos presentaban deficiencias técnicas que pueden provocar descargas eléctricas o incendios.
La revisión abarcó a 19 actores diferentes que la autoridad sospecha que venden productos eléctricos mediante el llamado dropshipping. Esto significa que un actor vende productos que no tiene en su propio almacén, sino que, cuando el cliente compra un producto, este se entrega desde otras plataformas comerciales, como las chinas Temu, Shein o Ali Express.
«Han dado la impresión de operar dentro de Europa, pero cuando recibimos los productos eléctricos en casa, a menudo procedían de un remitente completamente distinto. Principalmente chino», dice Per Samuelsson, jefe de departamento en la Agencia Sueca de Seguridad Eléctrica.
La autoridad encargó 22 productos, de los cuales llegaron 18. Ninguno de los productos, que iban desde cargadores USB hasta maquinillas de afeitar y hervidores de agua, cumplía los requisitos de seguridad de la UE.
La Agencia Sueca de Seguridad Eléctrica es la autoridad nacional de Suecia para la seguridad eléctrica y la compatibilidad electromagnética (EMC).
(29 de diciembre)
go to the original language article
