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Bruxelles (ANSA) – El núcleo de la investigación permanece inalterado: presuntos fraudes en las licitaciones, corrupción, conflicto de intereses, violación del secreto profesional. Una lista que reproduce los primeros cargos formulados por la fiscalía europea y notificados, tras una jornada entera de interrogatorios intensos, a Federica Mogherini, Stefano Sannino y Cesare Zegretti.
Los tres fueron puestos en libertad durante la noche sin ninguna condición: para los investigadores no existe riesgo de fuga y la presunción de inocencia permanece plenamente intacta, como reiteraron los propios investigadores que coordinan una pesquisa nacida —según las admisiones también de la oficina antifraude Olaf— de una denuncia que en Bruselas alimenta cada vez más interrogantes. Tanto que, según las primeras reconstrucciones, podría haber partido desde el interior.
Un topo del Servicio diplomático europeo (Seae) —durante años casa de Mogherini y Sannino— que habría señalado presuntas anomalías, encendiendo los focos sobre la relación entre Bruselas y Brujas, llegando al Colegio de Europa y a su Academia para jóvenes diplomáticos. Los investigadores están examinando minuciosamente fechas, actos y procedimientos de licitación, en un cuadro que sigue aún lejos de ser descifrado.
Entre los elementos destaca la compra del edificio de Spanjaardstraat por parte del Colegio de Europa, situada en una fecha muy próxima al inicio de la convocatoria: una coincidencia temporal que ha llamado la atención de los investigadores, abriendo la hipótesis de una posible alteración de la licitación.
«He aclarado mi posición con los investigadores que actúan en nombre de la fiscalía europea. En su larga tradición, la Academia siempre ha aplicado y seguirá aplicando los más altos estándares de integridad y equidad», subrayó la ex Alta representante en una nota publicada en la página web del colegio. Palabras acompañadas de la «plena confianza en el sistema judicial» y de la espera de que «la corrección de las acciones» de su instituto vivero de los eurocratas del futuro «sea comprobada».
Similar la disposición de Sannino, que ha asegurado «plena colaboración con las autoridades» pero que —arrollado por el caso y puesto bajo la lupa también de una investigación administrativa de Olaf por sospechas de favoritismos en los nombramientos internos en el Seae— ha decidido no esperar más, tomando el camino de la dimisión de la Comisión Europea donde desde principios de año dirige las políticas sobre Oriente Medio, Norte de África y Golfo (3 de diciembre).